Con sentido del humor y sin sentido del ridículo


Osama Bin Laden (perdón, Barack Osama) está entrando en unas políticas económicas que ni Adolf Hitler en la década de los años 30.


Con sentido del humor y sin sentido del ridículo, la Duquesa de Alba, doña Cayetana


 Un extraño sentido de humor negro lo tiene la ETA, que anuncia un abandono de las armas (¿dónde están?) pero no de las capuchas. El PSOE ya no sabe que vender para sacar cuatro votos.








Total Pageviews

Followers